
El miércoles pasado probé el Mini Cooper S Cabriolet. Esta unidad cuenta con el color Royal Grey MET, asientos de cuero marrón y la bandera de Gran Bretaña en el techo corredizo de lona. En su corazón lo impulsa un motor 2.0 turbo de 4 cilindros, llegando a los 189 caballos de fuerza y es la razón por la que el Mini Cooper S acelera de 0-100km/h en apenas 6.2 segundos.
La conducción del Mini en pocas palabras es: Emocionante, dura y deportiva. Clásico de la marca. Tiene una caja automática secuencial de 7 velocidades, que pueden manejarse desde las levas en el volante. El otro elemento de disfrute del auto es la lona corrediza. En apenas 18 segundos pasas a tener un Auto poderoso, deportivo y descapotable. Si bien no soy fanático de la lona, no hay argumentos para demostrar que es mejor o peor que el techo rígido en cuanto a durabilidad y permeabilidad del material.


Algunos puntos en contra del auto.
- Los asientos de atrás no son útiles
- Valija minúscula e incómoda
- Navegación no es compatible con Android.
- El precio de venta al mercado uruguayo USD 70.000 es elevado.
Para terminar, como siempre, agradecerle al dueño del auto por coparse con la idea de la reseña y por la buena onda.
El mini es un auto que por sus características tiene que ser un “Segundo auto” pero seguro es mucho más emocionante, divertido y fachero que el primero.

