El BMW i4 Gran Coupe se presenta como una de las opciones más refinadas dentro de la creciente gama de vehículos eléctricos de lujo. En su elegante diseño, se combina la estética deportiva de un coupé con la funcionalidad y el confort de un sedán, proporcionando una experiencia de conducción premium. A lo largo de esta reseña, exploraremos los diferentes aspectos que hacen del i4 Gran Coupe un vehículo excepcional en términos de diseño, rendimiento eléctrico, confort interior, calidad de los materiales, y su sofisticada tecnología.
El BMW i4 Gran Coupe destaca por un diseño que equilibra perfectamente la elegancia clásica de la marca con un toque contemporáneo, en línea con su identidad eléctrica. La característica parrilla doble en forma de riñón, aunque cerrada debido a la ausencia de la refrigeración tradicional de los motores de combustión, sigue siendo un sello distintivo del diseño BMW. Los faros LED finos y angulares, junto con las líneas fluidas que recorren el vehículo, contribuyen a una presencia imponente y atlética.
La silueta de coupé, con un techo inclinado hacia atrás, otorga un perfil aerodinámico y ágil. El diseño no solo es visualmente atractivo, sino que también se ha optimizado para mejorar la eficiencia aerodinámica, lo cual es crucial para maximizar la autonomía en un coche eléctrico. Las llantas de aleación específicas para vehículos eléctricos, con un diseño que minimiza la resistencia al aire, también juegan un papel importante en su rendimiento.
El corazón del BMW i4 Gran Coupe es su tren motriz totalmente eléctrico. La versión más accesible (eDrive40) proporciona una potencia más que suficiente para el día a día, con 335 caballos de fuerza y una aceleración de 0 a 100 km/h en unos 5.7 segundos.
Uno de los aspectos más impresionantes del motor eléctrico del i4 es la suavidad y la inmediatez de la entrega de potencia. A diferencia de los motores de combustión interna, que requieren una subida de revoluciones para alcanzar su máximo rendimiento, el motor eléctrico del i4 entrega todo su par motor instantáneamente. Esto resulta en una aceleración lineal y constante, sin los tirones o vibraciones típicas de los motores de gasolina.
Además, con una autonomía que puede llegar hasta los 590 km en el ciclo WLTP en la versión eDrive40, el i4 Gran Coupe ofrece una excelente combinación de rendimiento y eficiencia, lo que lo convierte en una opción viable tanto para viajes largos como para el uso urbano.
El interior del BMW i4 Gran Coupe es un verdadero testamento del enfoque de la marca en la calidad y el confort. Desde el momento en que se abre la puerta, es evidente que este no es solo un coche eléctrico, sino un verdadero BMW en términos de lujo. Los asientos de cuero Vernasca ajustables electrónicamente ofrecen una combinación perfecta de soporte y comodidad, ideales para viajes largos o sesiones de manejo dinámico.
El espacio interior es notable para un vehículo con una silueta de coupé. Aunque el techo inclinado podría sugerir un espacio reducido para la cabeza en la parte trasera, el diseño inteligente y la distribución optimizada aseguran que los pasajeros traseros disfruten de un amplio espacio para las piernas y la cabeza. El maletero también es espacioso, con una capacidad más que suficiente para un viaje de fin de semana o las necesidades diarias.
En términos de calidad de materiales, BMW ha mantenido su estándar elevado en el i4 Gran Coupe. Los revestimientos de cuero, las inserciones de aluminio cepillado y los detalles metálicos satinados en los controles de ajuste, reflejan una atención al detalle digna de los mejores autos de lujo. No hay rincones descuidados ni materiales de baja calidad, lo que realza aún más la experiencia de lujo.
Además, BMW ha incorporado materiales reciclados y sostenibles en algunas partes del interior, lo que subraya su compromiso con la sostenibilidad sin comprometer la calidad. Esto es particularmente relevante en un coche eléctrico, donde la sostenibilidad es un valor central.
Conducir el BMW i4 Gran Coupe es una experiencia sublime. La combinación de un bajo centro de gravedad (gracias a la ubicación de las baterías en el suelo) y una suspensión ajustada para ofrecer una mezcla entre deportividad y confort, hace que este coche sea ágil en curvas pero cómodo en rectas y trayectos largos.
El sistema de tracción trasera del eDrive40 proporciona una experiencia de manejo dinámica y entretenida, mientras que la versión M50, con tracción en las cuatro ruedas, eleva aún más la experiencia con un mayor nivel de control y precisión en las curvas.
El andar del i4 es suave y refinado, con una suspensión que absorbe de manera competente las irregularidades del camino, pero mantiene una conexión directa entre el conductor y la carretera. No se siente ni excesivamente rígido ni demasiado blando, logrando un equilibrio perfecto.
El BMW i4 Gran Coupe está repleto de tecnología de punta. La pantalla curva de BMW, que fusiona el panel de instrumentos digital con la pantalla central de infoentretenimiento, es uno de los aspectos más destacados del interior. Este sistema ofrece una experiencia intuitiva, con gráficos de alta resolución y capacidad de respuesta rápida. Además, el sistema operativo BMW iDrive 8 permite un control por gestos, comandos de voz y táctil, brindando múltiples opciones para interactuar con el vehículo.
El i4 también cuenta con una serie de ayudas a la conducción de última generación, como control de crucero adaptativo, asistente de mantenimiento de carril y un sistema de estacionamiento autónomo. Estas tecnologías no solo aumentan la seguridad, sino que también hacen que la conducción sea más cómoda y relajada en situaciones de tráfico denso o estacionamiento en espacios reducidos.
El BMW i4 Gran Coupe es mucho más que un coche eléctrico. Es una obra maestra de ingeniería y diseño, que ofrece una combinación única de lujo, rendimiento y tecnología. Con un motor eléctrico que proporciona una potencia impresionante, un interior lujoso y bien diseñado, y una experiencia de conducción refinada, el i4 Gran Coupe se posiciona como una opción ideal para quienes buscan un vehículo de alta gama sin comprometer el rendimiento ni el confort, todo ello con la sostenibilidad como eje central.
